El concepto de storytelling es muy antiguo, y no es otra cosa que el arte de contar historias, de saber como transmitir a través de la comunicación. En el ámbito audiovisual también es muy importante aprender a comunicar, ya que a lo largo del día vemos cantidad de piezas audiovisuales, pero ¿Cuáles nos dicen algo? ¿Que vídeos nos transmiten con fuerza un mensaje?
Pero antes de ponernos hablar sobre el storytelling audiovisual, vamos a definir este concepto de manera global.
¿Qué es el storytelling?
Storytelling proviene de la fusión de dos palabras, Story (historia) y telling (contar), es decir, contar una historia.
El storytelling es una gran herramienta de comunicación que ya se usaba hace miles de años cuando en la prehistoria se encargaban de realizar pinturas rupestres, más adelante también tenemos el ejemplo de las religiones y los textos sagrados. Por ello, se trata de una técnica muy sofisticada que trata de hacer que te identifiques con el producto o experiencia que te están contando, que quieras formar parte.
En la actualidad este concepto a vuelto a resurgir gracias a su uso por parte de grandes marcas comerciales, ya que saben que a través de una historia es la manera más fácil que tienen de que te identifiques con sus productos o servicios.
¿Qué es una buena historia?
Sabemos que estamos ante una buena historia si esta nos crea una emoción positiva que nos inspira a hacer una acción. Del mismo modo, nuestra historia debe desencadenar algún tipo de emoción en nuestro público para que quieran seguirnos y escucharnos.
El público no acude a ti por lo que haces, sino por las emociones que les haces sentir y el significado que tiene para ellos formar parte de tu experiencia.
¿Cómo se hace un buen storytelling?
Para hacer un buen storytelling debemos tener una historia con un buen conflicto, una tensión narrativa y una resolución o aprendizaje. Un ejemplo de storytelling son aquellas situaciones de superación en donde un individuo debe superar un mal momento y gracias a ello su destino cambia, todas las personas que se ven identificadas con ese individuo es normal que quieran verse reflejados y experimentar el mismo proceso de lucha y superación.
Debemos mostrar también le origen de las cosas, a las personas nos encanta saber que es lo que motiva a un individuo a actuar determinada manera, que es lo que les mueve para hacer algo o no hacerlo.
Nos sentimos profundamente inspirados con ello, y actuamos en función de las decisiones que nos dicta nuestro corazón y no nuestra cabeza, por lo que debemos contar una historia para que llegue al corazón de las personas y se sientan atraídas al mismo tiempo que intentan conocerte mejor.
Otro de los factores fundamentales para que tu storytelling tenga éxito es que se trate de una historia auténtica y profundamente honesta para que conecte con tu audiencia. Explicar historias es innato a la condición humana así que simplemente hay que dejar que la historia fluya en nosotros y conecte con tu audiencia a un nivel más profundo.
¿Cómo contamos nuestra historia?
Lo cierto es que hay miles de ejemplos de storytelling, podemos hacerlo con fotografías, una web, música, un blog, una película, etc. Hay miles de oportunidad para conectar con nuestra historia y solo tenemos que hacerlo de la manera correcta.
Si bien no debes olvidarte de los conceptos clave:
- Historia: Debemos contar una historia y esta debe contener los elementos fundamentales de la narración: un desafío, una lucha y un desenlace. Nuestra historia debe tener un problema que suponga un desafío y encontrar la solución al mismo, y siempre trabajando la empatía con el público.
- Experiencias: para llegar a nuestra audiencia debemos ser honestos y contar nuestra propia historia. Contar una historia ajena provocará que esta carezca de emociones y no llegue al público de la misma manera. Si bien deberemos evaluar que tipo de historia vamos a contar para poder llegar a las personas, debemos mostrar historias donde el público se sienta identificado.
- Comunicación: debemos usar un lenguaje acorde a la gente con la que nos vamos a comunicar, y tener claro a la hora de comunicarnos cual va a ser el mensaje.
- Emociones: mostrar emociones a través del lenguaje es lo que provocará sentimientos en nuestro público y los lleve a actuar de una determinada manera, ya sea realizando un viaje, comprando un producto o compartiendo tu información.
- Virtudes: enseñarse aspectos no comunes hará tu historia se vea reforzada y provoques más «admiración», lo que ocasionará que tu historia cobre fuerza.
- Creatividad: debemos ser originales con nuestra historia para provocar esa sonrisa en el espectador, ese pequeño detalle que genere empatía emocional.
- Desenlace positivo: si conseguimos que los aspectos mencionados anteriormente culminen con un final feliz habremos conseguido realizar un storytelling de calidad. Pero debemos mostrar como conseguimos el éxito, como hemos resuelto ese desafío que se nos presenta.
Cuando cuentas tu historia estas mostrando tus valores, tus virtudes y tu humanidad con el objetivo de conseguir una conexión auténtica y humana con tu audiencia. Poco a poco irás ganando su confianza, y enseñándoles que aspectos positivos estas ofreciéndoles en su vida hasta el punto que tu audiencia sentirá que eres necesario para ellos y no quieren un mundo sin ti.
La conclusión global es que el storytelling sirve para muchas cosas, ya sea ganar notoriedad de marca o vender una nevera, pero debemos preguntarnos si lo que estoy escribiendo emocionada, si provoca que mi audiencia vaya a querer comprar determinado producto.
Poder conectarnos con nuestra audiencia, aportar una buena historia, un buen contenido, trabajar las emociones, hablar de experiencias y, sobretodo, la creatividad y la forma en que nosotros nos comunicamos con nuestro público hará de nuestro storytelling un éxito.
Storytelling Ejemplos
Un storytelling no deja de ser una historia por lo que podemos encontrar cientos de ejemplos. Por ejemplo, cuando vemos una campaña de marketing o publicidad de helados y te apetece, o cuando vemos la imagen de un lugar paradisíaco y nos apetece estar ahí. Ejemplos podemos encontrar millones, simplemente debemos humanizar y empatizar con las personas. Que cuando veas un vídeo, una fotografía o leas acerca de un lugar desees estar en ese lugar, que te genere esa emoción que te haga ir hasta allá.
¿Ahora que ya sabes como hacerlo a que estas esperando para convertirte en storyteller?